Según datos de la Asociación Estatal de Acogimiento Familiar (Aseaf), en España solo el 15% de los 22.000 menores que viven separados de sus familias y son atendidos por los servicios de protección de las Administraciones, lo hacen acogidos en otro núcleo familiar, mientras que el 10% lo hace en hogares o pisos tutelados, y el 75% restante, en centros residenciales, “la opción menos recomendable” según establece la nueva Ley de Protección a la Infancia y la Adolescencia aprobada en julio de 2015. Una realidad que se hace aún más difícil de sobrellevar en unas fechas tan familiares como las navideñas.