Ya estamos con la vuelta al cole… como sabéis, la vuelta al cole implica muchas cosas nuevas: nuevo curso, nuevos amigos, nuevos libros, ropa nueva… es un buen momento para introducir o recuperar aquellas rutinas que durante el verano hemos dejado un poco abandonadas.
Es por ello que nos ha encantado la Misión Salud BucoDental de Colgate… Han realizado un estudio a nivel europeo sobre hábitos de higiene dental , y de la mano de la psicóloga Mariana Segura, nos ofrecen consejos para que los más pequeños de la casa vaya adquiriendo este hábito de manera fácil y divertida.
Cómo sabéis, los más pequeños aprenden imitando. A mí me pasa: mi pequeño no tiene aún dos años y siempre que nos cepillamos los dientes, nos pide su cepillo para hacer como nosotros. Le encanta ese momento de “juego”, en el que está en el baño con papá y mamá y ve que ponemos caras raras y hacemos ruidos al enjuagarnos y usar el colutorio. Si con 20 meses ya ve que cepillarse los dientes es una rutina y divertida, seguro que cuando sea mayor seguirá haciéndolo.
Además, al saber que es bueno para mi hijo, me fuerzo yo mismo a establecer esa rutina… Antes de comer nos lavamos todos las manos, y después de comer nos lavamos todos los dientes. De momento, él sólo juega a lavárselos; pero poco a poco iremos también enseñándole como debe cepillárselos, cuánto tiempo y con qué técnica para que sea todo un experto! Si conseguimos que siga disfrutando en estos momentos, seguro que de mayor se le escapará una sonrisa cada vez que se los cepille.
Evidentemente, nuestro hijo tiene un cepillo de estos de “niños” para él. Y como suele pasar, el prefiere lavárselo con los nuestros. Así que su cepillo sigue ahí sin usar, y él tiene uno cómo el de papá y mamá (el de papá naranja, el de mamá verde y el suyo rojo). Con la pasta de dientes tenemos otra batalla; él ve que nosotros nos ponemos, y que a él hacemos el gesto de ponerle… nos mira desconfiado, sabiendo que hay gato encerrado, aunque de momento no ha descubierto el truco.
En los consejos de la psicóloga que colabora con Colgate, nos cuenta que para concienciarles de la importancia de la higiene dental, podemos usar algún cuento. Nosotros tenemos uno en el que la protagonista se cepilla los dientes nada más levantarse y antes de acostarse; cada vez que llegamos a esa parte le explicamos que así tiene unos dientes limpios y sanos para comer todo lo que quiera. Tenemos también el baño preparado para él: unas escaleritas le suben hasta el nivel de los grifos, dónde él mismo puede coger su cepillo, abrir el agua y enjuagarlo.
Con todo esto, estamos seguros que nuestro hijo tendrá unos dientes sanos y limpios. Porque nos hemos esforzado (y divertido) en que sepa que es importante cuidar de sus dientes, y vamos trabajando para que adquiera los hábitos de higiene dental que hemos visto en el estudio de Colgate.
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